El buen Tomás
Hoy es un día triste para mí. Nos ha dejado, de forma inesperada, el compositor y pianista Tomás Bohórquez Nieto.
Tomás fue un compositor finísimo, con amplia cultura musical, fundador y teclista del grupo Módulos y posteriormente interesantísimo compositor, que demostraba con cada obra un criterio amplio, ecléctico y de una gran delicadeza.
De todo ello espero que hablen los expertos en la materia, y muy bien además. Yo sólo quiero destacar que, desde que lo conocí, quedé impresionado por su naturaleza bondadosa y sensible, culta y amigable, abierta de ideas. Acudí a sus conciertos y acudió a mis proyecciones, nos citamos en más de una ocasión y siempre le alabé el buen gusto y sus recomendaciones musicales, diversas y siempre bien fundadas. Se ganó mi respeto con bonhomía y razones. Siempre tenía una sonrisa en los labios y una cortesía que no se aprende, y todo ello a pesar de las adversidades.
En Noviembre del pasado año Tomás presentaba en el Auditorio de Centro Centro de Madrid su obra Latebra (El Quinteto), interpretada por el pianista Francisco Luis Santiago y el Cuarteto Diapente. Con motivo de esa representación aproveché para entrevistarle a propósito de la obra dentro de una serie de reportajes que estaba preparando. Luego, los malditos retrasos hicieron que la edición no estuviese preparada hasta hace unos días. No sé si llegó a verlo (lo que me produce una tristeza enorme) pero este es el único modo que tengo de homenajearlo: dejando que su voz nos lleve a la escucha de su música, con un registro audiovisual que permanezca.
Con todo mi cariño, Tomás. Fue un honor.
